El pase de diapositivas requiere JavaScript.

El mar está marcado con unas bandas grises, El quieto viento muerto desentona Y como hoja marchita es llevada La luna por la bahía tormentosa. Grabado claramente sobre pálida arena Está el bote negro: un joven marinero Sube a bordo en gozo distraído Con el rostro sonriente y mano reluciente. Y arriba los zarapitos claman Y por el pasto oscuro meseteño Van segadores mozos de cuellos brunos, Cual si fueran siluetas contra el cielo. Las siluetas, Oscar Wilde

Al noroeste de Portugal, en el distrito de Viana do Castelo, y subregión Minho-Lima, por donde dos grandes ríos fluyen libremente hasta llegar al océano Atlántico. El primero, en la cara norte, el Miño, que sirve de barrera fronteriza para separar a dos países como España y Portugal, y donde desembocan ríos secundarios como el Coura, que suelta sus aguas en Caminha. El segundo, el río Lima, donde también deja caer su caudal el río Vez, en Ponte da Barca, pero que al contrario del primero, no hace de barrera fronteriza entre el distrito de la cara sur, el distrito de Braga, sino que es el Neiva, un río que es desconocido para muchos de nosotros y que desemboca entre las freguesias de Castelo de Neiva y Antas, así que vamos hablar un poco de este lugar que tiene un poco de historia, y puede presumir de tener mar, río y montaña a pesar de sus 7,64 km².

Historia

Cuando vemos el nombre de esta freguesia portuguesa, llamada «Castelo do Neiva», podemos suponer que tiene un castillo, o lo tuvo, pero ahora tan sólo quedan los restos, siendo cierta la segunda. De esta forma si sabemos que había un Castillo y que el río que pasa sus tierras se le llama Neiva, llegaremos a la conclusión que el Castillo está justamente situado a las orillas de este pequeño río. Éste se sitúa en el Monte do Castelo, sus restos ya son bien escasos, la torre de homenaje y algunos pedazos del muro exterior, esta fue conquistada por Nuno Álvares Pereira a favor de D. João I, en la crisis de 1383-1385. En la Edad Media, fue el local escogido para la instalación de un castillo roqueiro, una denominación a los castillos portugueses que simplemente tenían un muro defensivo aprovechando una superficie rocosa y sin torre, con el fin de protegerse de los ataques moros o normandos, en un tiempo donde no había un poder central bien definido. Con el tiempo fue ganando importancia en la región, asumiendo como la cabeza principal de la Terra de Neiva.

«Condado portucalense carte-1070-fr» por Basilio – Trabajo propio. Disponible bajo la licencia CC BY-SA 3.0 vía Wikimedia Commons.

En la reconquista, el castillo de Neiva tuvo un papel importante en la preparación de la Batalla de S.Mamede (1128), ya que estaba a favor de D. Afonso Henriques, y que fue un momento crucial para el proceso de independencia de Portugal. Read More